Escribo por tensión, pulsión, por vocación.
Escribo porque no sé hacer otra cosa.
Me declaro culpable de toda culpa inconfesable.
Insomne, apasionada y otras tantas neurótica pero nada en serio.
23 septiembre 2013
La ansiedad por escribir es directamente proporcional a la ansiedad por masturbarse.
Y ninguna de las dos te deja dormir...
No hay comentarios:
Publicar un comentario