Escribo por tensión, pulsión, por vocación.
Escribo porque no sé hacer otra cosa.
Me declaro culpable de toda culpa inconfesable.
Insomne, apasionada y otras tantas neurótica pero nada en serio.
14 noviembre 2011
Usted disculpe, pero ¡Quiero sentir sangre en las venas!
No hay comentarios:
Publicar un comentario