Tu casa
mis libros,
tu fijación,
mis piernas.
Mis poemas, (mi casa):
nuestra libertad.
Tus libros,
mi fijación,
tu amor.
Tu casa,
mis libros
tu recuerdo,
mi tormento.
Escribo por tensión, pulsión, por vocación. Escribo porque no sé hacer otra cosa. Me declaro culpable de toda culpa inconfesable. Insomne, apasionada y otras tantas neurótica pero nada en serio.
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Me molesta tanto la palabra heroína como la de poetiza .... Es mero rencor a la etimología.
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Esta noche, leo, leo: " Te juré no escribirte. Por eso estoy llamándote en el aire para decirte nada, como dice el vacío: nada, nada...
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Hay recuerdos que no sólo duelen, laceran.